La semana pasada se dieron a conocer el número de aprobados en la oposición EPSO/AD/278/14 para administradores AD7 en los ámbitos de Informática forense y Análisis operativo. El resultado ha sido el siguiente (en verde el número de aprobados y en rojo los que no han superado las pruebas de Assessement Centre):
Cuando señalábamos en el título “una de cal y otra de arena”, nos referíamos precisamente a la diferencia en el número de aprobados. Mientras que en la convocatoria se establecía que ambos ámbitos contarían con 16 aprobados, uno de ellos ha sido ampliado hasta los 17 mientras que el otro ha sido reducido a 14.
Curiosamente (¿?) el porcentaje de aprobados en el Assessment Centre ha sido casi idéntico:
Puede ser una mera casualidad, pero resulta un poco sorprendente ya que, de acuerdo a la convocatoria, lo que debería haber sido igual es el número, no el porcentaje, de aprobados. Es decir, habiendo un número previsto de plazas idéntico en ambos ámbitos y número distinto de seleccionados para llevar a cabo las pruebas en el Assessment Centre, lo normal es que el porcentaje de aprobados en el ámbito de Infomática forense hubiese sido mayor.
Naturalmente no estamos en contra de la ampliación en el número de aprobados, pero sí que nos produce una cierta desazón el que en algún ámbito u oposición no se llega a cubrir el número de aprobados inicialmente previsto. En este caso además, ya habíamos señalado como el Comité de Evaluación si había mostrado especialmente cicatero dentro del ámbito de Informática forenses tanto en la admisión de los candidatos, como en la selección de acuerdo al Talent Screener.
De cualquier forma lo sentimos por esos dos opositores desconocidos que quizás deberían haber aprobado la oposición, pero aprovechamos para felicitar a los 31 aprobados de una oposición que sin duda ha sido muy exigente.
Bien, está claro que (con razón o sin ella) el tribunal consideró que los candidatos no cumplían los requisitos necesarios para ser funcionario europeo, y por tanto no están obligados a «llenar el cupo».
Yo no sé si en este caso concreto tendrán razón o no, pero si yo fuera miembro de un tribunal, sin duda tendría claro que no llenaría listas solo por llenarlas, y que aprueba el que lo merece en todas las pruebas (hay muchos muy inteligentes que aprueban la preselección sin ningún problema y hacen brilantes exámenes escritos, pero luego son incapaces sociales).
Hola Juan, está claro que no es obligatorio alcanzar el número previsto en la convocatoria (ni siquiera es siempre conveniente), pero en este caso creemos que el Comité de evaluación ha sido muy exigente.
No estamos hablando solamente de las pruebas del Assessement Centre (en realidad un 35% de aprobados es un resultado superior al de muchas otras convocatorias) sino del conjunto de la oposición, ten en cuenta que tres cuartas partes de los candidatos no accedieron ni siquiera a la evaluación del Talent Screener.
De cualquier forma, en este caso nosotros solo hemos analizado los números, por lo que tienes razón al señalar que sería necesario conocer tanto el nivel de los candidatos como su rendimiento durante las pruebas para juzgar la rigurosidad real de los evaluadores.