Continuando con la reflexión de ayer, hoy vamos a hacer referencia al «EPSOleak» de la pasada semana que ha muchos os ha llamado la antención y que es la guinda que le faltaba al pastel en que se ha convertido esta oposición. Por cierto, dice la RAE que “descubrirse el pastel” es una locución verbal que significa “hacerse público y manifiesto algo que se procuraba ocultar o disimular”.
Pues eso.
Sumario del asunto: el viernes 27 la Representación Permanente de España ante la UE publicó en su página web que los candidatos ya habían recibido en sus cuentas EPSO la invitación al Centro de Evaluación. Junto a ello señalaba el número total de seleccionados e incluso el porcentaje de españoles entre ellos. Algunos otros medios se hicieron eco de dicha información.
Nosotros no. Porque nosotros, como los candidatos de la oposición, sabíamos que EPSO no había comunicado ni la nota de corte ni la invitación al centro de Evaluación.
Publicar que EPSO había comunicado el resultado de la primera fase podría tratarse de una equivocación, pero adjuntar el número de aprobados (totales y españoles) en cada uno de los ámbitos no podía ser un error, evidentemente la REPER disponía de esos datos y evidentemente provenían de EPSO.
Es decir, gracias a ese error se hizo evidente que, a pesar de que no lo había comunicado a los candidatos, EPSO sabía ya quién había sido seleccionado y quién no.
En resumen, que la REPER española la lio parda.
De todas formas vamos a intentar ser biempensantes.
La comunicación de los resultados de una oposición a las representaciones nacionales es algo que entra dentro de la normalidad, ya que muchas de ellas organizan posteriormente actividades formativas para sus nacionales.
Posiblemente EPSO, como había anunciado, finalizó la selección en septiembre, más concretamente el viernes 27. Lamentablemente lo hizo a última hora y todos sabemos que un viernes a última hora es difícil empezar ninguna tarea, y comunicar los resultados a cientos de candidatos no es una tarea simple… así que lo dejó para después del fin de semana.
En cambio, las representaciones nacionales solo son 27 (los nacionales croatas no podían participar en esta oposición), así que un mensajito a cada una de ellas no era demasiado trabajo… y, respetando la protección de datos, envió el número de aprobados sin incluir, por supuesto, el nombre de los mismos. Al recibir dicha información la REPER española pensó que la misma ya se había comunicado a los candidatos y la hizo pública.
Como hemos dicho vamos a ser biempensantes y no creemos que en esto haya nada escandaloso.
Algunos malpensantes podrían señalar que la REPER española publicó los resultados por la mañana, no a última hora del viernes; o que EPSO no publicó los resultados el lunes, ni el martes, ni el miércoles; o que la REPER retiró la información el martes después de ver el revuelo que había causado; o que ni EPSO ni la REPER han dado ningún tipo de explicaciones y han intentado ocultar el hecho…
Pero todo eso son pequeños detalles… ¿o no?